Que lejos esta el sueño compartido, lejos la ilusión, que días largos donde todo es viejo, donde espero un poco de cordura para poder seguir, o un poco de bravura para no bajar los brazos.
De la esencia que acarreaba ya no encuentro ni una hebra, todo es llano, árido, resquebrajado, ni el yuyo mas bravo se animó a salir.
Sin embargo miro hacia atrás y puedo reconocerme todavía... y que lejos el sueño y la ilusión de un día, de ser pradera en primavera y no un desierto en agonía.
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3 comentarios:
he visitado tu blog, es muy bomito. Desde Madrid te mando un saludo
gracias Maria De Los Ángeles, me pone muy feliz saber que a alguien como tu,con tal sensibilidad le guste el blog,me atrevo a decir esto por lo que he leído del tuyo.estoy feliz por saber que encuentro gente con quien compartir,tener cosas en común y acortar las distancias a través de este medio.Un fuerte abrazo.
No hay que rendirse, hay que seguir luchando por volver a sentir la ilusión y la esperanza, hay que tener fe en el mañana, pues habrá otro manecer y quien sabe que nos traerá la marea.
Muchas gracias por tu comentario en mi post de TC, no sabes cuanto me ha emocionado saber que mi relato te ha traido recuerdos olvidados de tu niñez, y que en la palma de tu mano vuelves tener la magia, la ilusión y la esperanza en forma de esa capa fina de polvo dorado .
Un fuerte abrazo
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