De mi vida y de la vida misma
Apágame los ojos cuando los cierre y enciéndelos de nuevo al despertar.
Si despierto aquí, que los soles no se quiebren, que si no estás quien los abrirá.
Que si los abro en otro cielo no me duela, saber que no eres tu quien me despertará.
Apágame los ojos cuando duerma y enciéndelos solo tú al despertar.
Y si me pierdo en algún sueño no me sueltes, enciéndeme de nuevo en tu mirar.
Que sino encuentro el buen camino en otras tierras, promete que me esperaras.
Y si la luz se apaga un día promete que la encenderás.
Que si mis ojos miran lejos no es de pena, solo están mirando más allá.
Que si me duermo, amor, no es que me pierdas, prometo donde esté te he de esperar.
Y si la luz se apaga un día, que los soles no se quiebren y te alumbren donde estas.
Quiero llegar a ti, hasta tu ser, ser tu pensamiento.
Quiero estar intacta, lograr el equilibrio.
Provocando el roce a la hora que no esperabas.
Envolverte con aroma a reencuentro.
Quiero causarte sensaciones aun estando lejos.
Haz de sentir calor o frío, aroma de jazmines y lirios,
Serás la nube que la brisa amarre.
Quiero tocarte sin contacto alguno, pero más allá de los sentidos.
Quiero ser viento y llevarte en mí más allá de los latidos...
... y que seas parte de este vuelo.
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Fotografía de Wilhelm Leisten |
La puerta de mis sentidos está entreabierta, no me animo a entrar ni a que me veas.
No es fácil cruzar el umbral, quizá es cobardía, quizás es inconsciencia.
Cada gesto, cada mirada, cada señal,
le implora a mi alma que olvide este amor,
que no pierda el control de la razón ni de la calma.
Y luego sin poder evitarlo...
...cada silencio,cada espacio de este tiempo,
cada ausencia de tu estar, que aun me inquieta al extrañar,
le implora a mi alma, que no olvide este amor,
que no lo esquive, que es pisotear la rama verde
que aun no crece,
en la temprana edad de su existencia, que implora
vivir con impaciencia
y no puede volver al retroceso de haber nacido
alguna vez... en alguna primavera.
Esta historia comenzó
quizás como un cuento de hadas
pero un día se rompió,
pues la realidad la mataba.
Que triste que son los sueños
de una princesa frustrada,
de alguien que nunca llegue
quizás a ser bien amada.
Yo se que existe un rey,
al cual princesa ama.
Tal vez él nunca se entere...
...pues la princesa no habla.
Estas intacta, como en esos días de gloria que eran rutina para una mujer sin pasado ni historia.
Tu mirada resplandece como el sol, aun cuando tus ojos se asemejan más a los atardeceres, donde los amaneceres ya pasaron y no dominan.
Tu coraje está aquietado pero no tu valor por la vida, tu pasión se muestra esquiva pero no tu amor por la vida.
Estas intacta mujer, tu inocencia se ha escapado pero la piedad predomina, tu esencia se ha instalado más allá de los tiempos y los climas.
Tu cuerpo no es el mismo, las sienes blanquecinas, los huesos ya cansados, después de tantas tormentas que has librado.
Pero aun así te ves hermosa mujer, imponente, sabia y valiente. Los años han pasado pero no para tu alma que aun brilla.
En San Valentín a todos los enamorados
(Escrito en Febrero de 1995):
¿Que es sentirse enamorado? esa mezcla de tristeza y alegría, de llanto y risa, de desconcierto.
¿Que es el amor? es querer gritar tan fuerte, apretar los puños demasiado y de repente el llorar y el reír es un agrado.
¿Que es estar enamorado? esa mezcla de coraje y cobardía, querer ser noche y de repente el día.
Andar sin saber donde, imponer mi rebeldía, recobrar las fuerzas, luchar con ira ...
...y sentirme de repente niño débil que reclama aún tu compañía.
Se desarma mi alma cuando te ve cruzar,
eres el fantasma de lo que pudo ser y no será.
Quizás me traiga alegrías, quizás me traiga tristezas
recordar esas promesas del amor que ya no esta.
Se desarma mi alma de verte cruzar con pena,
de sufrir esta condena de no estar con quien amas.
Quizás el tiempo te enseñe a vivir con tu verdad,
quizás algún día tengas coraje para amar.
O quizás se desarme de pena mi alma cuando te vea sin coraje,
sin verdad y sin alguien a quien amar.
Cada vez que respiro profundo y cierro los ojos, es como mirar a mi alrededor, hoy ...y verte ...y verme ...y tenernos, sostenernos.
Cada suspiro en el tiempo hace que te vea cruzando la puerta de casa para ir a jugar.
Cada vez que veo mi niña imagino nuestras tardes de cuentos, de inviernos con chocolate caliente y pan tostado.
Recuerdo los días de sol, en el arroyo donde me enseñaste a pescar.
¡¡¡Recuerdo la vida!!!
Me enseñaste a compartir, a reír, a perdonar y a pedir perdón, a no dañar y a construir.
Cada vez que veo el hoy, contengo la respiración por un instante y cerrando los ojos imagino tu presencia para no olvidar tu rostro.
Los suspiros que te lleva el viento son míos, madre, donde quiera que estés...
Que lejos esta el sueño compartido, lejos la ilusión, que días largos donde todo es viejo, donde espero un poco de cordura para poder seguir, o un poco de bravura para no bajar los brazos.
De la esencia que acarreaba ya no encuentro ni una hebra, todo es llano, árido, resquebrajado, ni el yuyo mas bravo se animó a salir.
Sin embargo miro hacia atrás y puedo reconocerme todavía... y que lejos el sueño y la ilusión de un día, de ser pradera en primavera y no un desierto en agonía.
Esta soledad tan mía, mi única amiga fiel, mi mayor aliada.
Se que no me dejara de lado ni en las noches ni en los días.
Esta amiga fiel, la que abrazo en la penumbra de este cuarto deshabitado, se que es quien me escucha en esta noche callada.
Desarmada esta mi alma, indefensa,ante el ataque de las penas que amenazan, pero allí mi amiga eterna, la soledad que me aguarda.
Esta soledad tan mía, que me abraza en las mañanas, ya no me dejara de lado, pues si muero me acompaña.